Esta semana ha tenido lugar uno de los hechos políticos más importantes de esta legislatura. Hemos aprobado un nuevo modelo de financiación autonómica.
Dicho así quizá suene algo "grueso" pero seguro que a todos y todas nos importa que se haya aprobado un nuevo sistema que destine 11.000 millones de euros adicionales, para mejorar los servicios básicos para la ciudadanía. Mejor sanidad, educación y servicios sociales. De eso estamos hablando cuando se debate sobre financiación autonómica.
Por tanto, los mayores beneficiarios de este compromiso, son los ciudadanos y ciudadanas españoles, vivan donde vivan, en condiciones de igualdad. Uno de los compromisos más importantes que hizo el Presidente Zapatero en su discurso de investidura y que en poco más de un año, ya ha cumplido.
Siempre que se negocian reformas tan importantes como esta, se genera tal volumen de información y declaraciones al respecto, que es fácil perderse en el camino, pero una vez que se ha aprobado este sistema por todas las Comunidades Autónomas (sin un solo voto en contra, a pesar del ruido mediático del PP) debemos de tener muy claro en qué nos beneficia en el día a día.
Nos beneficia porque se ha establecido un sistema de "reparto económico" mucho más justo y equitativo, que beneficia de igual manera a todos los ciudadanos y mantiene a su vez, nuestro sistema de solidaridad que sirve de ejemplo para muchos de nuestros países vecinos.
Ya no hay excusas posibles. Las Comunidades Autónomas van a recibir una inyección económica adicional muy importante que ha de destinarse a mejorar los servicios sanitarios, educativos y servicios sociales. En estos últimos, especial relevancia toma la Ley de Dependencia. Una Ley que algunas Comunidades se niegan a aplicar correctamente y que se ha convertido en uno de los pilares en torno a los que calcular las cuantías económicas destinadas para cada Comunidad. Es decir, que si Madrid y Valencia hubieran hecho los deberes y el registro de personas dependientes estuviera actualizado en ambas comunidades, habrían salido aún más beneficiadas.
A pesar de esto, Madrid y Valencia han sido dos de las comunidades que mayor financiación adicional van a recibir, de modo que tienen la obligación de destinar esta cuantía a mejorar unos servicios que se han visto muy perjudicados en los últimos años en ambas comunidades: la sanidad, la educación y los servicios sociales.
Seremos muy exigentes para que así sea, como lo serán los ciudadanos y ciudadanas, que son los verdaderos beneficiarios de este nuevo sistema, que supondrá además, un importante estímulo para la lucha contra la crisis.
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